Hasta que la providencia vuelva a juntarnos

Vicente cortando el pastel con él que le daba la bienvenida a un Feliz 2009. El 2009 no esta siendo un año demasiado "amable" y ahora con la marcha de Vicente, se hace un poco más difícil.
A Vicente le encantaba recibir a los visitantes y a los padrinos en cualquier rincon del RDT. Nos contaba historias, historias serias que él vestía de humor.
Como dice un amigo, volver a Anantapur no va a ser lo mismo sin Vicente. Pero seguro que lo encontraremos en todos los rincones de Anantapur y su milagro va a continuar. Ya se encargó él de que un montón de gente se comprometiera con ello. Menudo era el Kaiser ¿verdad David?

Siempre tenía una sonrisa, una frase, una observación para todo aquel con el que se encontraba en sus paseos por el RDT. Ir con él desde la oficina a la cantina, 100 metros, podría durar media mañana. Un día se encontro con unas chicas que acababan de llegar. Venían de pasar un mes en un Asrham meditando y asi se lo dijeron orgullosas a Vicente. Éste, mirando a su alrededor contestó: "Qué perdida de tiempo; con la cantidad de cosas que se pueden hacer en un mes".
Y es que fundamentalmente Vicente era un hombre de acción. Gracias a eso ahora existe el Milagro de Anantapur.

Mucha gente va a echar de menos a Vicente, pero nadie tanto como los millones de personas con los que compartio vida y anhelos. Gentes de la India, gentes de Anantapur.


"Tengo muy claro que ninguna acción buena se pierde en este mundo. En algún lugar quedará para siempre." Vicente Ferrer